Thursday, February 23, 2006

EMPACO MALETAS

El invierno detendrá las manecillas del reloj que nos arrastra...
Empaco lentamente mis maletas tendidas en el lecho revuelto tras haber brindado con mi amada "muerte" toda una noche de pasión desenfrenada, sudamos, quisiste estrangular con amor, mi pescuezo, pero las sábanas te pesaron tanto, que te untaste en mi alma consumida por mi amante "soledad".
Mi respiración se torna incomprensible, agitada, y desarmonizada.
Mi amiga "noche" me espera en la estación, lleva un pañuelo bordado, tan pálido... como sus lunares que juguetean en sus lugares.
Me preparo con "tristeza" para mi ausencia, charlamos un rato antes que bese mi mejilla y me bañé de su sabor, los labios.
El expreso al norte parte en minutos, la luz de destierra a destajos, y dientes de ajos cuelgan del cuello de mi enemiga,
Los cuervos trazan su formidable figura en los oscuros cielos en el ojo cerrado del paraíso, entonando la serenata de los infelices.
Lagrimas se acumulan en las vertientes de mis ojos arremangados, embutidos en el viscoso humo de mí ultimo cigarrillo, acumulando las cenizas de los pájaros mañaneros cantores, que cremaron sus alas en mis párpados.
es la hora... y el reloj me baja entre sus brazos me devora en sus mandíbulas de tik tak
el krak
Triza los ventanales violados por las plumas de un cuervo mendigo,
Trisado por el aleteo de mis queridas mariposas negras
Trisado por la cortina fantasmagórica de los aullidos de mis perros
Trisado por cada grito de ayuda escondido en mis letras
letras ocultas tras mariposas negras que bailan al son de aullidos
aullidos obedientes a mis gritos
Gritos sumergidos en los alarido de un cuervo.

Monday, February 20, 2006


Su mirada levemente juguetona
Intenta abarcar con cierta supremacía,
El estigma del descuartizamiento de los cinco,
Que hoy, solo los une la esencia vital de los cuerpos
Y vagos recuerdos de eternas discusiones nocturnas.
Hoy observo un espejo
Cuyo reflejo devuelto
Es una mirada perdida, temerosa.
Es mi sangre
deslisandose por otra carne
la que yace cristalizada
En mi retina.
¡ Esa!, es la misma mirada que se dibujo en mi rostro,
cuando el crepúsculo de luna
era mi vela
en los momentos que estuve inmerso
En la soledad de una ausencia.

desde el trono que le arrebato a satàn


A puñaladas frías y certeras abriré mi carganta para depositar las repercusiones de mis latidos en tus manos pálidas, efervescentes de un clamor tarareado por la seriedad de mi ritual atípico de cristalizar mis lamentos en los azulejos del infierno.


En mis ojos se tejen los episodios desfragmentados, mientras que de las rendijas del concreto desde el pavimento que se abrió a cada una de mis pisadas, Satán me injuria a la vez que mis mariposas negras desafían su trono.


escapan contorneándose en los cuerpos de las musas desnudas tendidas boca arriba
en las brasas que dibujan en sus pieles los "te amo, pero en mentira", cuerpos desnudos rociados por las babas descarriadas de los que navegan por la sangre chamuscada en el las hierbas vigorosas de invierno.


desde las entrañas se traza las pinceladas de azufre embutidas en miel, miel que se difulca en los parajes ensobrados bajo las faldas de los higos que hablan a media noche


Thursday, February 16, 2006

travesìa sin fin

este es una trenza de estrofas creadas entre una amiga y yo.


el humo que se moldea en mis pulmones se hace tan mío, que se desliza en las tinieblas de la conciencia que cae rendida ante los molares que mordisquean mis pies cabalgando fragilmente en los trigales nebulosos


Figuras fantasgóricas desprenden mis ventanas, gimen lastimeras, alargando hacía mí descarnadas tenazas, apago mis velas me hundo en lo profundo del ojo mayor, que me trasciende.


shhh... silencio... el susurro tras la nuca de las almas confiesan los imperdonables crímenes... destajando las pieles en pares, caen y caen en un desliz de la mejilla corroída por las lagrimas amargas, palpitares que rebotan en las cuatro paredes destrozando el silencio ensordecedor que comulga en el desbastador remordimiento en que el segundero tararea la serenata del tiempo insocegable


sumergida en la penuria del santuario que de comunión les sirve, abrigo en manos de hielo
Una fija idea de escapar del martirio que me tienen preparado cual banquete los mercaderes de almas sin destino.


Corremos descalzos, cansados de pisar el vidrio molido, beberemos un trago de bálsamos espigado, carcajadas sin forma revolotean y escupen injurias, almas sin destino que juegan bajo las faldas de musas provocativas endemoniadas, gimiendo en orgasmos depositados en los lechos penumbradores.


Fricción instantánea de pieles desarraigadas por la voz, fuerte del castigo, que fue destinado para los que se atreven a traspasar el muro destruido del cadalso, pervertido que alimenta, la pasión del enemigo.
El hada sonmolienta del martirio, desnuda ante los ojos del atosigador alevoso que cumplía siendo alma en pena su destino.


Exiliado el hombre, jugó con la desnudez la felicidad colgaba de los poros columpiándose de las estrellas a lo lejos que reían sin mas preocupación, una caricia, una manzana embutida en sangre, un castigo de eternidad... el paraíso esta bajo el fruto ensangrentado por el hombre victorioso.


Wednesday, February 08, 2006


No es el polvo el que hunde mi piel en sus fauces de tiempo imperdonable
Estrangulando entre sus molares los cuerpos agotados,
algo desahuciados
De los que agonizan sin mas remedio, que el de mirar sin comprender
a la orilla del minutero,
haciéndole el quite de manera discreta,
mordiéndose los labios inferiores,
Hasta abrirlos y dar en fuga disimulada la carne dilatada.


la cortina palpable del aullido perruno
les profesará mi llegada...
Sí...

Como he dicho; una mujer
se ahogará en los llantos que alguna vez
Se me hicieron presente (los muy canallas).
Que desde mi primera tos de mariposas, huyeron despavoridos
Mordisqueados

con el silencio...
¡¡Mi silencio... único significado sutil de mi ira. !!


No es el polvo acurrucado en mi piel...
Es la telaraña pegoteando mis párpados
Adoloridos...

Que carajo me han dado de beber
Un veneno con gusto a miel
La vida con aroma a muerte,
Otra belleza más oculta tras la arpía mascara de tirana,
Quintrala de botas negras,
De muerte esperando a los pies de mi cama,
Esperando para revolcarnos con pasión
Esperando a revolcarme sin la mas mínima
Señal de amor hacia ella.

No sueño con una novia...
Pues encajamos querida
Tampoco sueñas con un novio

Si en cada esquina que escupo el amargo de mi saliva
Del asfalto pareciera parir una planta que sube y sube
Y cuando lanzas tu mirada en alto te topas
con los zapatos que retumban en un eco,

ecos que van y vienen.




Que más podría desear,
Intocxicarme con el humo
danzando por mis entrañas
jugetonamente,
acariciando mi carganta
después de haber plasmado su teñido en mis pulmones...
me hundo cada vez en el pecho de tantas hojas polvorientas
que esperan ser conquistadas por la emoción de comprender
Su belleza, su contacto con la perfección minúscula.
Ahí donde el hombre se enlaza, a ti, a ella, a mí...
Vertiendo lagrimas arrebatadas a destajos
por el favor misterioso de una pluma
Emborrachada por susurros que sucumbieron hace tanto,
El susurro que bajó con gracia
Se acurrucó sin problema
en el pecho acurrucador amamantador
de la lactancia palidesida de papeles
Vírgenes papeles amados por las emociones.
Que macabramente bellos,
Crueles que te sujetan de finos hilos
Piernas y brazos
Sangras... sangras un poco
Y al bajar la mirada
La sangre derramada quedara cubierta por papeles.

Sunday, February 05, 2006

Una risa restringida,
Censurada por la timidez
Emergía de tu boca
Emergía de tus labios rojos
Dibujándola la casi perfecta sonrisa
Sumergida en las fauces
Del gentío desbordando
Una cortina de voces y carcajadas
Una lluvia inmunda
De humanidad contagiada
Eramos solo los dos
Solo dos sumergidos
En las bocanadas de humos
Que despedían agitando sus vestidos pálidos desde nuestras mandíbulas
Humo que se torneaban entre la multitud
Multitud sumergida en el subterráneo