QUISIERA NO ABRIR
Aullando me fui...
aullando entre alcantarillas, donde se pierde el aliento del eco revolcado en un espasmo
perfumado en aceite de rosas.
mis dedos acalambrados rasguñan las paredes de lo imposible,
la sangre cuajada brota entre las yemas, en lagrima de perversidad y entrega.
Dibujo tu nombre en las cenizas de los cuerpos cremados que adornan el espejo empañado.
Navajazos de sudor adhiriéndose en la piel,
Cuando de madrugada me veo jugando a las escondidas,
junto a las almas de esos niños que callaron y ahora penan.
El néctar putrefacto mezclado en la saliva que cuelga de las estrellas,
Golpea esta puerta...
A cada paso dirigido a abrirla,
me despluma un latido,
me desprende un aliento,
me roba un segundo de mi vida,
riendo, ellos van ensogando mi pescuezo...
y el vapor moldeado por mis labios huye,
gesticulando la pronunciaciòn de...